Últimamente, en los círculos angloparlantes se ha viralizado un artículo titulado: "He desperdiciado ocho años de mi juventud en las criptomonedas".

Es un extenso texto escrito el pasado fin de semana por Ken Chan, cofundador de Aevo, y ya el título resulta bastante doloroso. Lo más interesante es que este artículo contrasta completamente con otro publicado anteriormente por el reconocido hosseeb, que hacía un llamamiento para que la industria recuperase el espíritu del largo plazo.

¿El tono de Ken? Decir que es "desesperanzador" quizá se quede corto. Un cofundador de proyecto que lleva ocho años bregando en este sector hace un repaso de su carrera profesional con un enfoque casi autonegador; esto en sí mismo ya dice mucho.

Algunos dicen que es una muestra de sinceridad, otros lo ven como una nueva forma de marketing. Pero, sea como sea, leer estos dos artículos juntos es como observar dos caras del espejo actual de la industria cripto: por un lado, se grita por mantener la fe; por otro, se cuestiona si este camino realmente merece la pena.

¿Y vosotros qué pensáis? Después de mucho tiempo en este sector, ¿os sentís cada vez más convencidos, o cada vez más perdidos?