Últimamente, el panorama macroeconómico está bastante delicado. La expectativa de que la Reserva Federal de EE. UU. baje los tipos de interés en diciembre sigue presente, y el mercado está esperando a que se confirme. En cuanto a la liquidez, sí que ha habido una cierta mejora: el Departamento del Tesoro ha realizado una recompra de deuda a gran escala y el ciclo de QE parece estar llegando a su fin.

Ethereum acaba de completar la actualización Fusaka, lo que ha mejorado la eficiencia de la red y reducido los costes en la capa dos, algo que es claramente positivo. Sin embargo, si te fijas en los mercados de predicción, la confianza de los inversores en que Bitcoin supere los 100.000 dólares a final de año ha caído del 60% al 24%, lo que indica que el sentimiento se está enfriando. A nivel macro global también hay algo de ruido, como el repunte repentino en la rentabilidad de los bonos japoneses, y de vez en cuando aparecen movimientos de aversión al riesgo.

**La situación actual de Bitcoin**

La clave está en la zona de los 93.500. Ese precio es tanto el de apertura anual como el máximo que no ha conseguido consolidar en varios rebotes anteriores. Si esta vez lo supera con volumen, podríamos dar por cerrado el periodo de debilidad que empezó a mediados de abril; si sigue atascado ahí, lo más probable es que siga oscilando entre los 90.000 y los 93.500, o incluso que vuelva a testear el soporte de los 90.000.

**Ethereum, relativamente sólido**

Desde el punto de vista técnico, tiene mejor aspecto. Los 3.050 dólares se han consolidado y ahora funcionan como soporte. El siguiente paso es ver si puede superar la franja de resistencia entre los 3.350 y 3.500. Por supuesto, esta fortaleza reciente está relacionada tanto con la actualización interna como con la entrada de capital vía ETF, pero hay que tener cuidado porque el rally ha sido muy rápido y existe riesgo de corrección a corto plazo.

**¿Qué hacer operativamente?**

En la situación actual de Bitcoin, lo más sensato es operar en rango: aprovechar el movimiento entre los 90.000 y los 93.500 para vender en resistencia y comprar en soporte. Si se acerca a la resistencia y no puede romper, se puede considerar una posición corta a corto plazo; si se acerca al soporte y se estabiliza, buscar oportunidades largas. En Ethereum, el foco está en ver si puede superar los 3.350; si lo logra, habría que evaluar el potencial de recorrido adicional.