
La regulación de las criptomonedas en el Reino Unido ha experimentado una transformación radical tras el anuncio del Tesoro en diciembre de 2025. El gobierno ha instaurado un marco normativo integral que incorpora los activos de criptomonedas al sistema principal de supervisión financiera, superando el enfoque fragmentado anterior. Este cambio supone el mayor avance en el cumplimiento regulatorio de criptomonedas en Reino Unido en 2025, y marca la transición de una regulación centrada en el blanqueo de capitales (AML) hacia una supervisión financiera completa. El nuevo marco del Tesoro comenzará a aplicarse en octubre de 2027, dando al sector un calendario definido y expectativas regulatorias precisas.
El eje central de esta reforma es la inclusión de las empresas cripto bajo la supervisión directa de la Financial Conduct Authority, igualando su control al de los proveedores tradicionales de servicios financieros. Hasta ahora, las empresas del sector operaban en un área gris regulatoria, donde solo se exigían requisitos AML y normas de promoción financiera a quienes dirigían su oferta a consumidores británicos. El anuncio de diciembre de 2025 cambia este paradigma al establecer que las actividades con criptomonedas serán reguladas como servicios financieros, no solo como riesgos de blanqueo de capitales. Este enfoque firme y proporcionado busca ofrecer al sector claridad legal, protección al consumidor y salvaguarda de la integridad del mercado. La decisión del Tesoro reconoce que el mercado de criptomonedas ha alcanzado la madurez necesaria para recibir un tratamiento regulatorio equiparable al de los productos y servicios financieros tradicionales.
Entre ahora y octubre de 2027, el régimen regulatorio vigente sigue aplicándose a todos los proveedores de servicios de criptoactivos que operan o promocionan en Reino Unido. Este periodo de transición permite a las empresas prepararse para el nuevo marco, mientras siguen vigentes los requisitos AML y las reglas de promoción financiera actuales. La FCA ya ha iniciado la consulta sobre la adaptación de las normas del FCA Handbook a futuras actividades reguladas de criptoactivos (consulta CP25/25), lo que demuestra su compromiso con el desarrollo de estándares proporcionados y operativos para el sector emergente.
La FCA ha establecido reglas específicas sobre promociones financieras que fijan estándares claros para la comercialización de productos cripto a consumidores británicos, constituyendo un pilar fundamental de la regulación de mercado FCA para criptomonedas en Reino Unido. Estas normas clasifican los criptoactivos como "Restricted Mass Market Investments", activando medidas reforzadas de protección al consumidor que las empresas cripto deben implementar de inmediato. La regulación de mercado FCA para criptomonedas en Reino Unido incluye seis requisitos clave que transforman la operativa promocional en el sector.
| Requisito | Detalles | Fecha límite de implementación |
|---|---|---|
| Advertencias y resúmenes de riesgos | Todas las promociones deben incluir advertencias de riesgo claras y resúmenes completos | Finales de 2026 |
| Prohibición de incentivos a la inversión | Las empresas cripto no podrán ofrecer incentivos monetarios ni no monetarios para estimular la inversión | Finales de 2026 |
| Periodos de reflexión | Los inversores primerizos tendrán un periodo de reflexión obligatorio de 24 horas | Finales de 2026 |
| Advertencias de riesgo personalizadas | Las advertencias emergentes adaptadas al perfil del inversor deben mostrarse antes de la compra | Finales de 2026 |
| Clasificación de clientes | Se deben implementar sistemas para categorizar adecuadamente a los clientes | Finales de 2026 |
| Evaluaciones de idoneidad | La idoneidad de la inversión debe verificarse según el perfil del cliente y las características del producto | Finales de 2026 |
Las directrices regulatorias del Tesoro británico establecen que las promociones financieras cripto no pueden incluir incentivos o bonificaciones que puedan inducir decisiones de inversión poco informadas. Esta prohibición afecta tanto a recompensas monetarias como a beneficios no monetarios, lo que transforma profundamente las estrategias promocionales tradicionales del sector. El requisito de advertencias de riesgo personalizadas garantiza que cada inversor reciba información específica sobre los riesgos relacionados con su perfil y el criptoactivo promocionado, creando un mecanismo de protección más preciso que los sistemas anteriores.
El periodo de reflexión obligatorio de 24 horas para inversores primerizos permite una pausa antes de comprometer capital, dando margen para reconsiderar la inversión sin presiones. Este requisito cubre una importante brecha de protección en el mercado de criptomonedas, donde la rapidez suele conllevar decisiones poco fundamentadas. Los sistemas de clasificación de clientes deben distinguir entre inversores minoristas, clientes profesionales y contrapartes elegibles, aplicando reglas específicas a cada tipo. La obligación de evaluación de idoneidad exige que las empresas cripto verifiquen si la inversión se ajusta al perfil financiero, experiencia y objetivos de cada cliente antes de ejecutar la operación.
Más allá de la promoción, las directrices regulatorias del Tesoro británico indican que el cumplimiento implica aplicar los estándares del FCA Handbook a las actividades con criptoactivos. Los requisitos del Senior Management Arrangements, Systems and Controls (SYSC) Sourcebook cubren la gobernanza, el régimen de directivos y certificación, el cumplimiento en prevención de delitos financieros y la resiliencia operativa. Estos estándares garantizan que las empresas cripto implementen controles internos sólidos, responsabilidad directiva y gestión de riesgos operativos comparables a las instituciones financieras tradicionales. El Environmental, Social and Governance (ESG) Sourcebook también es aplicable, reflejando los compromisos del sector financiero británico con la sostenibilidad empresarial.
Las empresas de criptomonedas deben desarrollar estrategias de cumplimiento integral para afrontar el periodo de transición hasta octubre de 2027. El proceso de cumplimiento normativo en Reino Unido comienza con un análisis exhaustivo de las brechas entre la operativa actual y los nuevos estándares del FCA Handbook aplicables a actividades reguladas con criptoactivos. Las empresas deben comparar sistemas, gobernanza y procedimientos actuales con los requisitos del SYSC Sourcebook, identificando áreas que exigen mejoras o una reestructuración profunda.
La construcción de una infraestructura de cumplimiento es una prioridad clave en esta fase preparatoria. Las empresas cripto deben contar con sistemas sólidos de clasificación de clientes, que distingan con precisión entre inversores minoristas, clientes profesionales y contrapartes elegibles según la FCA. Estos sistemas deben integrarse en los procesos de onboarding, recopilando y verificando la información necesaria para las evaluaciones de idoneidad antes de cualquier operación. Además, deben implementar soluciones tecnológicas que permitan advertencias de riesgo personalizadas, periodos de reflexión de 24 horas y monitorización automatizada del cumplimiento en todos los canales promocionales y las interacciones con clientes.
La capacitación y el desarrollo de competencias del personal son esenciales para el cumplimiento normativo de las criptomonedas en 2025. Todo el personal que promueva, asesore o facilite operaciones con criptomonedas debe conocer los requisitos regulatorios aplicables. Los programas de formación deben cubrir la prohibición de incentivos, la implementación técnica de los periodos de reflexión, los requisitos de advertencias y resúmenes de riesgo, y las normas de conducta exigidas para el sector cripto. La alta dirección y los responsables de cumplimiento requieren formación detallada sobre gobernanza, el régimen de directivos y certificación, y los estándares de resiliencia operativa reforzada que afectan al sector de criptomonedas.
Es imprescindible establecer sistemas de documentación y registro que evidencien el cumplimiento de todos los requisitos regulatorios. Las empresas deben desarrollar políticas escritas para la prevención de delitos financieros, la implementación de controles y sistemas, la gobernanza y las metodologías de clasificación de clientes. Los registros de evaluaciones de idoneidad, periodos de reflexión ofrecidos, advertencias de riesgo y materiales promocionales deben mantenerse de manera integral. También es clave establecer canales de comunicación externa con los reguladores para responder a las solicitudes de información de la FCA y demostrar preparación para la transición de octubre de 2027. Consultar la documentación sectorial de la FCA, especialmente el CP25/25 sobre la aplicación de las reglas del FCA Handbook a criptoactivos regulados, aporta información valiosa sobre las expectativas regulatorias.
El marco sancionador de la FCA para activos digitales en 2025 establece consecuencias sustanciales por el incumplimiento de la regulación sobre criptomonedas, haciendo que la adhesión a las directrices regulatorias del Tesoro británico sea operativamente indispensable. Las empresas que no implementen las reglas exigidas sobre promociones financieras, evaluaciones de idoneidad o sistemas de clasificación de clientes se exponen a acciones de supervisión severas, incluidas sanciones financieras importantes, restricciones operativas y la posible retirada de la autorización. La FCA dispone de poderes sancionadores equiparables a los aplicados a los servicios financieros tradicionales, y no existen estándares reducidos para el sector cripto.
Las sanciones por infracciones regulatorias pueden alcanzar millones de libras, especialmente cuando afectan a gran número de consumidores o persisten sin remediación. El historial sancionador de la FCA en el sector financiero muestra su disposición a imponer penalizaciones severas por vulneraciones de protección al consumidor, y las empresas de criptomonedas deben prever un tratamiento equivalente. Además de las sanciones económicas, el regulador puede emitir censuras públicas que dañan la reputación y la credibilidad de la empresa, acelerando la pérdida de clientes hacia competidores que cumplen la normativa. Las restricciones operativas pueden limitar la capacidad de las empresas para realizar ciertas actividades o servir a determinadas categorías de clientes, restringiendo la operativa sin llegar a la prohibición total.
Los requisitos de supervisión del mercado cripto británico suponen un cambio radical en las expectativas regulatorias para la conducta empresarial en el sector. La FCA llevará a cabo una monitorización sistemática de materiales promocionales, plataformas de trading e interacciones con clientes para identificar incumplimientos. Las empresas que operen sin autorización se enfrentarán a medidas sancionadoras como órdenes judiciales que prohíban la prestación de servicios de criptoactivos a consumidores británicos y la congelación de activos ligados a infracciones regulatorias. El regulador promueve una supervisión proporcionada pero firme, de modo que los incumplimientos menores recibirán advertencias y plazos razonables para subsanarse, mientras que las infracciones graves o reiteradas conllevarán sanciones severas.
El periodo de transición hasta octubre de 2027 no exime a las empresas de los requisitos regulatorios actuales. Las empresas cripto que operan en la actualidad sin registro en la FCA y sin cumplir las normas sobre promociones financieras ya están sujetas a medidas sancionadoras, no solo a futuras responsabilidades. El compromiso de la FCA con la supervisión del mercado cripto se refleja en acciones recientes contra empresas que operan sin autorización y que no implementan las protecciones exigidas para los consumidores. No debe interpretarse la fecha de implementación de octubre de 2027 como una prórroga de las obligaciones regulatorias; por el contrario, las empresas deben aplicar de inmediato las reglas de promoción financiera, los controles AML y los estándares de gobernanza, mientras se preparan para la regulación integral de la FCA. Plataformas como Gate, que priorizan el cumplimiento normativo y la protección del usuario, evidencian que los negocios cripto sostenibles integran los requisitos regulatorios en su estrategia operativa, en vez de considerar el cumplimiento como un obstáculo para la rentabilidad. El entorno sancionador demuestra que el incumplimiento comporta riesgos que superan con creces cualquier ventaja competitiva percibida al operar sin plena conformidad normativa.











